¿Quieres ser residente español? Conoce la ‘Golden visa’ a cambio de invertir en vivienda

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¿Quieres ser residente español? Conoce la ‘Golden visa’ a cambio de invertir en vivienda

Son muchas las familias de toda Europa y del resto del mundo que se plantean comprar vivienda en las Islas Canarias pensando en un lugar de retiro para su jubilación, así como en contar con una vivienda vacacional que sea al mismo tiempo una inversión segura. Además, desde hace unos años existe un incentivo extra: aquellas inversiones en vivienda superiores a los 500.000 euros -ya sea en una o varias compras- traen de la mano obtener una visa de residencia española. Una ‘golden visa’ que abre la puerta a solicitar eventualmente la nacionalidad española y, con ello, obtener un pasaporte europeo. 

Contar con un “segundo pasaporte” implica grandes ventajas, y es una herramienta especialmente utilizada actualmente por ciudadanos de países como Rusia o Ucrania -en parte, debido a una situación política actual más convulsa que en otras áreas-, así como China, Estados Unidos o Brasil. Lo mismo se aplica a Gran Bretaña -especialmente a raíz de un posible Brexit y la eventual pérdida de la ciudadanía europea- y Francia -en este caso, debido a la elevada carga fiscal para los grandes patrimonios-. Invertir en el mercado inmobiliario español y canario cuenta para ellos -y para cualquier extranjero que así lo desee- con un incentivo extra que muchas veces se convierte en motivo principal de la compra.

‘Golden visa’ a cambio de inversión: una vía de moda para atraer capital

Con todo, España no es el único país que cuenta con un programa de este tipo. Tal y como recoge este reportaje del NY Times, al menos 14 países en todo el mundo ofrecen sus ‘golden visa’ o incluso pasaportes para extranjeros que inviertan en el mercado inmobiliario en su país. Existen firmas de abogados especializadas en este tipo de trámites, como es el caso de Thoel & Asociados, donde trabajamos desde el sur Tenerife, foco de este tipo de operaciones inmobiliarias en España.

De la misma forma, muchos países -incluyendo 20 de los 28 Estados miembros de la UE-, así como Estados Unidos, ofrecen visas de residencia -que pueden derivar en pasaportes- para extranjeros dispuestos a invertir en negocios no relacionados con la propiedad inmobiliaria. La creencia es que atraer inversión repercutirá positivamente en sus economías. Existen incluso países que ponen en venta sus pasaportes por precios que rondan los 100.000 dólares. 

Inversiones a cambio de residencia o pasaportes: un negocio de 20 billones de dólares

Los analistas estiman que este tipo de movimientos de inversión a cambio de permisos de residencia o pasaportes se han convertido en un negocio que mueve aproximadamente 20 billones de dólares al año. Y ello tiene un efecto transformador del mercado inmobiliario, impulsando las economías de pequeños países o áreas que hayan atravesado una crisis y necesiten a traer dinero a cambio de una ventaja para el extranjero.

Eso sí, instituciones como el Parlamento Europeo o la Organización de Cooperación Económica y Desarrollo trabajan para que este tipo de crecimiento no se traduzca en prácticas de riesgo, como blanqueo de capitales, evasión fiscal o movimiento internacional de criminales o terroristas. Pero el foco se encuentra en países como algunos estados del Caribe, Turquía, Chipre o Malta, donde se expiden pasaportes a compradores de propiedad sin que se les exija siquiera pasar tiempo en estos países, o bien pasar muy poco tiempo en ellos. 

De hecho, quienes defienden esta fórmula aseguran que los requisitos y el veto que experimentan los compradores de vivienda que opten a la residencia suelen ser mucho más estrictos que los que se aplican al común de los ciudadanos cuando aspiran a obtener la residencia por otras vías -por ejemplo, por motivos laborales-, con lo que el filtro ante posibles delincuentes es mucho mayor.

De otro lado, encontramos a países como Brasil, Dubai, Grecia o Portugal, además de España, donde los requerimientos para optar por la nacionalidad -y obtener un pasaporte- son mayores. Por ejemplo, Portugal requiere que se cumpla un periodo de 5 años desde la compra, durante el cual el extranjero comprador deberá pasar en el país al menos una semana al año. En España y en Letonia, el periodo para obtener la nacionalidad es de 10 años y, en el caso de Letonia o Grecia, además, se exige superar un test de lengua y haber residido en el país durante importantes periodos de tiempo. Dubai, por su parte, prácticamente en ningún caso garantiza la ciudadanía a extranjeros. 

Por tanto, el comprador deberá tener en cuenta estos requisitos antes de lanzarse a adquirir un inmueble: normalmente, cuanto mayores sean las ventajas de ser residente de un país determinado, menos laxos serán los requerimientos y más tiempo deberá transcurrir para que se pueda optar a la nacionalidad. 

¿Qué países compran más visas de residencia?

Quienes más invierten en ‘golden visa’ de residencia en otros países son sin duda los nacionales de China y de Rusia, en segundo lugar. Los franceses, por su parte, muestran cada vez más interés en este tipo de inversión -como técnica de ahorro fiscal-, así como británicos que esperan, de paso, mantener su ciudadanía europea en caso de que Reino Unido salga definitivamente de la UE. 

Los estadounidenses también protagonizan muchas de estas operaciones: en los 5 años previos a abril de 2018, los ciudadanos de Estados Unidos recibieron nada menos que 4.327 ‘golden visas’ tan sólo de España, por motivos fiscales y financieros, pero también políticos -la llegada de Donald Trump al poder supuso, según recoge el NY Times, un récord en el número de ciudadanos americanos que renunciaron su nacionalidad estadounidense-. 

Como cifra de interés, Knight Frank, una consultora inmobiliaria británica, estimó el pasado año que el 36% de las personas con más de 30 millones en activos netos contaban con un segundo pasaporte. 

‘Golden visa’ como reclamo de venta y herramienta de marketing

Este tipo de empresas aseguran también que la posibilidad de obtener la residencia en países como España gracias a una compraventa de vivienda constituye una potente herramienta de marketing. De hecho, existen promociones enfocadas desde el primer momento hacia este tipo de público, más interesado en obtener la residencia española que en las ventajas de su inversión. Es posible incluso que, desde el momento en que se hace la primera entrega económica, el reloj para obtener la nacionalidad comienza a contar, aunque la entrega de llaves pueda retrasarse años mientras se construye la vivienda. 

Un ejemplo es el de Abama Luxury Residences, en Tenerife sur (Islas Canarias). Su jefa de ventas, María Moreno, aseguró para el mismo reportaje del NY Times que aproximadamente el 25% de los compradores de esta promoción de lujo procede de fuera de la UE, mayoritariamente de Rusia, Ucrania, Brasil y Estados Unidos. Además, cuatro de cada cinco aplica para obtener una golden visa. 

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